Desde 1990, el sitio arqueológico de Cacaxtla (Tlaxcala, México) nos ha servido de terreno experimental para desarrollar, probar y aplicar diferentes métodos de registro y de visualización. A lo largo de estas tres décadas, las nuevas tecnologías de cómputo revolucionaron la forma de trabajar tanto en la adquisición de información como en los formatos gráficos de representación. Los resultados son cada vez más precisos, exhaustivos y confiables.
La pintura mural es registrada con fotogrametría digital para obtener una copia tridimensional a escala y sin distorsión de los murales, de tal forma que es posible superponer una impresión del archivo al mural de manera perfecta.